Caterina
Carlo Vecce
Título original: Il sorriso di Caterina
Español: 2024 – Alfaguara
Traductor al español: Carlos Gumpert
Entretenida novela del profesor italiano Carlo Vecce. Se trata de una obra de ficción con algunos escenarios y personajes históricos. Utiliza documentos legales existentes, en especial un acta de liberación de una esclava que, según el escritor, pudo ser la madre de Leonardo Da Vinci.
Caterina es una princesa de las montañas del Cáucaso. Su madre había muerto al nacer. Su padre la deja al cuidado de su abuela y una esclava rusa, cuando parte a la guerra. En un momento dado la niña decide irse tras su padre, pero es capturada como esclava. El padre es asesinado por los francos. Desde ese momento viaja por muchos lugares y es vendida en diversas ocasiones. Queda al servicio de diversas personas, en diferentes ciudades, hasta que en Florencia obtiene la libertad que le otorga su última dueña. Antes de su liberación ha tenido dos hijos, posiblemente con un notario que proviene de la población de Vinci. Su segundo hijo recibe el nombre de Leonardo.
Presenta varias voces narrativas, todas en primera persona, que dan cuenta de su experiencia personal, en algún momento, con Caterina. Es Caterina la que amarra las voces para darle estructura y eje argumental a la narración. Los diferentes relatos nos pasean por las repúblicas italianas medievales como Venecia o Florencia entre 1439 y 1494; por las Montañas del Cáucaso; el mar negro, Tanais, Constantinopla…
Encontramos temas como la esclavitud e importancia para el desarrollo económico. También la libertad es una idea que recorre la narración:
«Libertad. Era la consigna, la palabra más sagrada y venerada, en la ciudad donde nací, Florencia: Florentina Libertas. Era la palabra que gritaba el pueblo cuando se rebelaba contra los ricos y poderosos que siempre lo habían aplastado bajo el peso de leyes, estatutos, cargas, y se lanzaba furioso como un río en crecida a las calles y plazas, como cuando expulsó al duque de Atenas»
El comercio: «La mercaduría, decía el maestro, es el arte que encuentran los hombres para suplir lo que la naturaleza no ha podido hacer, o lo que Dios no ha querido hacer, de producir en cada país todo lo necesario o conveniente para el vivir humano».
La lengua franca, la clásica oposición entre civilización y barbarie; la lectura y escritura; las religiones y muchos otros temas nos deleitan en una lectura dinámica y muy fluida.
Dice la sinopsis de la editorial:
La increíble historia de Caterina, una niña nacida en la meseta caucásica. Su lengua era la más antigua del mundo y ella estaba destinada a ser una guerrera como sus ancestros, pero un día se vio arrastrada violentamente a la historia. Capturada en Tana, la última colonia veneciana en la desembocadura del Don, emprende un asombroso viaje por el Mar Negro y el Mediterráneo para llegar a Florencia en pleno esplendor del Renacimiento. Convertida en esclava por unos mercaderes, tuvo varios hijos ilegítimos, pero a uno de ellos, fruto de su unión con un ilustre notario florentino, lo amó por encima de todos, aunque él nunca pudiera llamarla madre por su condición de esclava. Aquel niño al que ella transmitió todos sus conocimientos sobre las criaturas y la naturaleza, se llamaba Leonardo da Vinci.
Algunos comentarios de la crítica:
«Un libro fascinante, a medio camino entre la novela y el ensayo histórico, con una documentación excepcional».
Begoña Alonso, Elle
«Un enorme descubrimiento. Es imposible no dejarse llevar por su emoción. […] Una obra inmensa que, además de ser un canto a la libertad y a la mujer, nos abre un mundo».
Sandra Faginas, La Voz de Galicia – Fugas
«Caterina ofrece muchos de los placeres de los libros recientes de Maggie O’Farrell, sólo que con un aire apenas un poco más cercano. […] La novela no solo funciona como una explicación literaria de la obra y la vida de Leonardo da Vinci. También es una refutación de la imagen del Renacimiento como un periodo de ligereza y alegría en la historia de la humanidad».
Luis Alemany, El Mundo
«Vecce ha decidido combatir el inevitable olvido. […] Brillante».
Nieves Cuerda Moreno, El Generacional
«Escrito por uno de los mayores expertos en Renacimiento del mundo. […] Este libro es un híbrido entre un ensayo académico, un documento histórico y novela, con el que el lector descubrirá que el Renacimiento no era aquella utopía de cultura, arte y riqueza que nos habían vendido».
La Sexta
«Estaobra […] revoluciona todo lo que se conoce sobre el artista porque propone una nueva visión del mismo».
Rubén Fernández-Costa, Magas, El Español
«Caterina se ha convertido en una sensación literaria en un tiempo récord.[…] Es una gran novela épica […], estandarte de quienes llegan a un nuevo país y le traen todo el tesoro de su singularidad y diversidad».
Nueva tribuna
«La historia de Caterina, uno de los últimos espacios en blanco que todavía quedaban por rellenar dentro de la vida del artista».
La Razón
«Todo ello salido de la pluma de Carlo Vecce, sin duda uno de los mayores estudiosos del Renacimiento y de la figura de Leonardo, y que le ha llevado más de una década de composición. En ella nos narra, magistralmente, la increíble historia de Caterina. […] A medio camino entre la novela y la reconstrucción histórica, es una obra maravillosa».
Miguel Ibáñez, La Comarca
«Un auténticoterremoto que desvela, quizá, el misterio de los orígenes de Caterina, la madre de Leonardo da Vinci».
Bertrand Guyard, Le Figaro
«Una novela que cambia la historia».
Leonardo Merlini, Amica
Caterina
Carlo Vecce
Originaria de un pueblo de la antigua Circasia ubicado en las montañas del Cáucaso, la princesa Caterina era aún una niña cuando fue secuestrada y esclavizada por los francos. Obligada a iniciar un largo viaje en el que cambió de amo muchas veces, llegó inicialmente a Constantinopla y más adelante a Venecia y a Florencia. Tras dar a luz un hijo “ilegítimo” al que fue obligada a renunciar, Caterina fue “alquilada” como nodriza por un caballero florentino. Por los azares del destino, allí se reencuentra y reinicia el romance con el padre de su hijo, el notario Piero Butti. Caterina tiene otro hijo, a quien pone el nombre de Leonardo, en honor al santo que libera las cadenas, protege los esclavos y cuida las parturientas. Meses después del nacimiento de Leonardo, este mismo notario logró que Caterina cumpliera el sueño de recuperar su libertad.
Siendo una mujer libre, Caterina se casó y formó un hogar con Antonio Butti, con quien tuvo cinco hijos más. Caterina crió a Leonardo hasta los diez años, momento en el que le fue arrebatado y enviado a Florencia para recibir educación. Si bien Caterina amó a todos sus hijos, Leonardo ocupó siempre un lugar principal en su corazón.
Caterina es una novela de ficción muy bien documentada, en la que los protagonistas seguramente existieron y los hechos relatados son al parecer ciertos. El libro narra en primera persona muchas historias que se entrelazan entre sí, siendo Caterina el hilo conductor que va tejiendo la trama y la ficción la herramienta que usa el autor para lograrlo.
Si bien es una novela muy interesante, este es un libro difícil lectura; las extensas descripciones, muchas de las cuales no aportan fuerza a la historia, las numerosas palabras en otras lenguas y la ausencia de diálogos, lentifican la lectura y dificultan avanzar con agilidad, especialmente en los primeros capítulos. La lectura exige máxima concentración para poder conectar los personajes y comprender la trama sin perderse en el intento.
Habría que añadir que Caterina parece una mujer demasiado perfecta, lo cual resta credibilidad a la historia.
El libro es una invitación a reflexionar principalmente sobre la esclavitud y la libertad. Pretende dar voz a todos aquellos seres humanos que han sido privados de sus derechos más elementales, despojados de su dignidad, padecido la injusticia y muerto en el olvido; es un reconocimiento a la infinidad de “Caterinas” que han sufrido a lo largo de la historia y a las que siguen sufriendo frente a la indiferencia del mundo a su alrededor. Por sí solo, este hecho hace que Caterina sea un libro que vale la pena leer.